Por José Martínez Cayaffa*
*José Martínez Cayaffa es el periodista escrito más prestigioso de la ciudad de Florida que cuenta con una trayectoria de 30 años escribiendo de deportes desde las páginas de diario EL HERALDO.
Quizás no sea tiempo de celebraciones, antes bien las preocupaciones por las presentes circunstancias que en lo competitivo atraviesa la institución con su primera división, deberían estar en primera instancia. Pero Candil (el viejo San Lorenzo de Candil, que hoy acumularía bastante más años que los 52 que marca su historia oficial o puramente administrativa) siempre se las ha ingeniado para por estar por encima de los avatares de los gano-empato-pierdo de cada domingo. Hasta alguna vez hemos llegado a pensar que disfruta, con algo de masoquismo deportivo, estas situaciones de alto riesgo de la competencia.
Que hasta ha salido renovado y fortalecido de las contingencias que lo han llevado en varias oportunidades a ser un habitué de las luchas del ascenso.
FÚTBOL Y ALGO MÁS
Sus ancestros, aquellos que perdieron parte del nombre por una cuestión reglamentaria, pero que mantuvieron para si el diseño de la camiseta azulgrana, seguramente mucho tuvieron que ver con esa filosofía con respecto a la vida y al deporte.
En aquellas épocas había que hacer grandes sacrificios hasta para reunirse para jugar al fútbol, a partir de que la lucha de la clase obrera consiguió que los domingos pasaran a ser una jornada de merecido descanso para los trabajadores, el fútbol paso a competir con las casi obligatorias misas y la pelota se transformó en un formidable elemento sociabilizante capaz de ir derribando las, en esos tiempos, sólidas fronteras derivadas de lo económico.
Y los jóvenes chacreros del noroeste floridense le fueron dando forma a un club que más allá de los momentos complicados que ha debido atravesar, se mantiene vigente y ha sido ejemplo en varios aspectos.
CRECE DESDE EL PIE
Porque, aunque parezca paradójico, Candil es una de las instituciones que más jugadores tiene afiliados en el Fútbol Infantil y, nos consta, está más dentro de las más cumplidoras con sus obligaciones. Se ha hecho de un compromiso notorio con la niñez y la juventud, asociándose con organizaciones sociales que tienen similares cometidos.
Participa (con un sentido ético-reglamentario que, lamentablemente no todas exhiben) en todas las divisionales formativas y constantemente ha nutrido su plantel principal con elementos de su cantera.
Por todo ello, más allá de que circunstancialmente soplen vientos adversos en primera división, la vigencia y el futuro de la institución aparecen asegurados.
Feliz aniversario azulgrana y gracias por su tiempo, estimado lector.
